Sobre la ribera derecha del río Delaware, descansa la ciudad más grande del estado de Pensilvania. Filadelfia es la quinta ciudad más poblada de Estados Unidos y suele ser una visita turística interesante para todos aquellos que viajan a Nueva York o Washington D.C., al encontrarse a medio camino entre estas dos ciudades.
Fundada en 1682, Filadelfia – cuyo nombre proviene del griego y significa “ciudad del amor fraternal” – es una de las ciudades más antiguas del país, y lleva con honor el hecho de ser uno de los centros históricos, culturales y artísticos más importante del gigante norteamericano.
Benjamin Franklin es una de las personalidades más importantes nacida en Filadelfia. También fue un foco importante para la historia afroamericana y, cómo no, destaca por ser el lugar donde se firmó la Declaración de Independencia de los Estados Unidos.
Hoy en día, Filadelfia es una ciudad vibrante y cosmopolita, que merece la pena visitar.
Si te encuentras en Nueva York y quieres explorar Filadelfia y las cercanas comunidades Amish, puedes contratar las excursiones de un día que ofrece la agencia City Travel NYC, expertos en conseguir que sus clientes vivan una experiencia inigualable:
1. Realiza un tour guiado por el Independence Hall, la cuna de los Estados Unidos
Si eres un amante de la Historia, Filadelfia es una ciudad que te encantará, pues fue aquí donde el Comité de los Cinco – compuesto por John Adams, Thomas Jefferson, Benjamin Franklin, Roger Sherman y Robert Livingston – firmó la Declaración de Independencia de los Estados Unidos .
El histórico hecho de la firma de la Declaración de Independencia tuvo lugar, en julio de 1776, en el Independence Hall de Filadelfia (concretamente, en la estancia conocida como ‘Assembly Room‘).
Once años más tarde, los representantes de los doce estados que componían el país en aquella época, se reunieron para comenzar la gestación de la Constitución de los Estados Unidos.
El edificio del Independence Hall es la piedra angular del Independence National Historical Park y ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Hay tours guiados disponibles todo el año. La manera ideal de no perderte detalle de uno de los lugares históricos más importantes del país.
2. Siéntete como Rocky Balboa
Hasta 1976, Filadelfia mantenía un perfil bajo en el campo del protagonismo cinematográfico, sobre todo si la comparabas con otras grandes urbes estadounidenses. Sin embargo, ese año se estrenó el gran éxito “Rocky”. La película protagonizada por un treintañero Sylvester Stallone, puso a Filadelfia en el firmamento del cine.
Cada día, centenares de turistas suben corriendo las escaleras que llevan a la puerta principal del Museo de Arte de Filadelfia, mientras lanzan ganchos al aire y tararean la mítica banda sonora de ‘Rocky’.
Al llegar a lo alto de las escaleras, saltan con los brazos en alto, antes de disfrutar de la bella vista, que incluye el paseo de Benjamin Franklin y los rascacielos de la ciudad.
Para contemplar la experiencia cinéfila, siempre puedes sacarte una foto junto a la estatua de bronce de Rocky, construida para el estreno de ‘Rocky III’, cuando ya la franquicia era un gran éxito de taquilla. Si eres de los que no tiene mucha vergüenza, estaría bien que lanzaras el grito de ‘Adriannnnneeeeeeeeeeee’, a todo pulmón, cuando te saques la foto.
3. Visita la Campana de la Libertad (Liberty Bell)
Otro de los símbolos históricos de Filadelfia es la Campana de la Libertad. Esta campana es uno de los iconos de independencia, abolición de la esclavitud, carácter de la nación y libertad de los Estados Unidos.
Su uso más recordado es aquel que se le dio el 8 de julio de 1776, cuando se tocó para llamar a los ciudadanos de Filadelfia que quisieran presenciar la lectura de la Declaración de Independencia.
La Campana de la Libertad tiene un peso cercano a una tonelada y puede ser visitada gratuitamente todos los días del año, en una zona acristalada desde la que se puede admirar el Independence Hall.
4. Pasea y compra en mercado de Reading Terminal
En una vieja estación de tren, encontrarás el colorido y diverso mercado de Reading Terminal. Con sus 125 años de historia, el mercado ofrece de todo un poco. Locales y turistas pasean por las hileras de puestos cada día, buscando productos frescos – como quesos, frutas, marisco y carnes -, joyas, ropa, utensilios caseros, complementos y baratijas de todo tipo.
Además, hay una zona pública equipada con mesas y sillas para que la gente se tome allí la comida comprada en cualquiera de la docena de restaurantes de comida variada que hay en el recinto.
Es un lugar perfecto tanto para observar a la gente local, como para saborear la gastronomía de Filadelfia y llevarse algún souvenir.
5. Visita los museos
Dicen que la zona verde del paseo de Benjamin Franklin fue creada a imagen y semejanza de los Campos Elíseos parisinos. Lo cierto es que el resultado es una avenida llena de jardines y árboles, que inspira a pasear y disfrutar del paisaje.
Además, también tiene fama de ser el centro cultural de Filadelfia, pues aquí encontrarás lugares como la Fundación Barnes (que cuenta con pinturas de Renoir, El Greco, Goya, Monet y Gauguin, entre otros pintores de renombre), el Instituto Franklin (divertidísimo y didáctico museo de ciencias que incluye muchas muestras interactivas e incluso scape rooms), la Academia de las Ciencias Naturales de la Universidad de Drexel, el Museo Rodin (que contiene la colección más grande de obras de Rodin fuera de París) y el Museo de Arte de Filadelfia, creado en 1876 como parte de la celebración del centenario de la Declaración de Independencia de Estados Unidos, y que hoy en día es uno de los museos de arte más reconocidos del país.
Por último, a 15 minutos a pie del Museo de Arte de Filadelfia, se encuentra la antigua prisión de Eastern Estate, que estuvo en funcionamiento desde 1829 a 1971. Se trata de una de las mejores visitas culturales de la ciudad.
6. Pasea por el muelle del río Delaware
Una vez formado por descuidados muelles y espacios públicos a los que se les sacaba escaso provecho, el litoral del río Delaware se ha convertido en uno de los espacios más vibrantes y activos de Filadelfia desde que comenzó el siglo XXI.
La razón la encontramos en la apertura de una serie de atracciones y parques muy interesantes, Cherry Street Pier y Race Street Pier, así como a lugares de temporada – como Spruce Street Harbor Park y Blue Cross RiverRink – y la realización de eventos musicales y culturales repartidos durante todo el año. Además, esas hermosas vistas del puente Benjamin Franklin, que conecta Filadelfia con Nueva Jersey, son un plus que todos quieren admirar.
7. Admira la belleza de Boathouse Row, en el río Schuylkill
En 1821, la creación de la presa de Fairmount (ahora situada a espaldas del Museo de Arte de Filadelfia) convirtió el río Schuylkill en el lugar perfecto para salir a remar tranquilamente al atardecer.
A mediados del siglo XIX, la ciudad aprobó la construcción de las 10 encantadoras casitas que forman Boathouse Row. Ahora, este lugar se ha convertido en un monumento histórico nacional. Las casas – que aún son utilizadas por los clubes de remeros, tanto aficionados como colegiados – proporcionan una de las mejores fotos de Filadelfia.
Obtén una vista de cerca durante un paseo por Kelly Drive, o una mirada de gran angular desde Martin Luther King Jr. Drive, y no te pierdas su maravilloso aspecto nocturno, cuando las luces brillantes que enmarcan las casitas crean reflejos idílicos en la superficie del río.
La entrada Las 7 mejores cosas que ver y hacer en Filadelfia se publicó primero en Viajablog.
from Viajablog http://bit.ly/30raIUO
via IFTTT
No hay comentarios:
Publicar un comentario