He visitado Ámsterdam en varias ocasiones y en cada una de esas visitas me ha mostrado una cara distinta. La primera vez fue en el viaje de fin de carrera con la gente de mi universidad. Podéis imaginar el desparrame y no me juzgaréis cuando os diga que los recuerdos que tengo son, literalmente, borrosos.
Después llegarían otro par de visitas más relajadas, en las que descubrí la parte cultural y natural de esta preciosa ciudad. Para rematar la faena y cerrar, por ahora, el círculo, mi último viaje a Ámsterdam lo hice con mis grandes amigos de Irlanda. De hecho, tanto Avistu como Sergi, compañeros en este blog, también estuvieron en aquel viaje épico. Creo que ha sido una de las veces que más me he reído en la vida. Los detalles quedan para nuestras reuniones entorno a cervezas cuando podemos coincidir.
Y es que viajar a Ámsterdam es hacerlo a la ciudad de los canales y el ambiente bucólico en invierno, pero también a la ciudad con una de las mejores fiestas de Europa, en la que las bicicletas son las reinas y los museos los reyes. Una ciudad joven, viva y con unas ganas locas de que la descubras. Para ello, sobre todo si tienes poco tiempo, puedes escoger entre un buen número de excursiones.
Entre las mejores excursiones que hacer en Ámsterdam, me quedaría con las siguientes:
1. Paseo en barca por los canales de Ámsterdam
Si preguntas a la gente qué recuerda de su viaje a Ámsterdam, una de las primeras cosas que le vendrá a la cabeza es la red de canales sobre la que crece la ciudad. Esos canales, con unos 100 km de longitud, son las arterias de una urbe que parece vivir cómoda tan cerca del líquido elemento. Tanto es así, que no son pocos los locales que prefieren vivir en un barco, amarrado a uno de los muelles del canal, que en una casa convencional. Si quieres probar la experiencia, que sepas que puedes alojarte en varios hoteles flotantes distintos.
Por ello, una de las mejores excursiones que hacer en Ámsterdam es la que te lleva a recorrer sus canales a bordo de un barco.
La mayoría de tours por los canales de Ámsterdam pasan por los principales, como los de Keizergracht – bautizado así por Maximiliano de Austria en 1612 y de 4 km de longitud – y Prinsengracht, conocido como el “Canal del Príncipe”, en honor a Guillermo de Nassau, príncipe de Orange.
2. Recorrer Ámsterdam en bicicleta
Y si los canales son un icono de Ámsterdam, el otro es la bicicleta.
He alquilado una bicicleta en Ámsterdam en 3 de mis 4 visitas y no tengo la menor duda de que es la mejor manera de conocer la ciudad. Eso sí, en Alicante no tengo coche y también la uso para moverme, así que debo reconocer que no soy imparcial en este juicio.
Disfruta de un paseo por toda la ciudad utilizando su extensa red de carril bicicleta, y no dejes de visitar sus bonitos parques. A mí el que más me gustó fue Vondelpark, verdadero pulmón que ver en Ámsterdam.
3. Descubre el Barrio Rojo de Ámsterdam
El Barrio Rojo es uno de los lugares más polémicos que ver en Ámsterdam.
Símbolo del liberalismo sexual para unos, vergüenza e icono del proxenetismo para otros. Lo cierto es que esas calles llenas de escaparates iluminados por luces rojas, desde los que mujeres con poca ropa miran a los viandantes de forma insinuante, son un imán para los turistas que viajan a Ámsterdam. La gran mayoría se acercan por curiosidad, y otros muchos lo hacen porque en esas calles también abundan los famosos “coffee shops”, donde puedes fumar – o ingerir – sustancias que suelen estar prohibidas en tu país de origen.
Una especie de Sodoma y Gomorra del siglo XXI que, por supuesto, hay que visitar para poder opinar con fundamento.
4. Museos de Ámsterdam
Y sí, Ámsterdam es una ciudad donde la cerveza, las drogas, la fiesta y la prostitución alcanzan una fama importante, pero si ninguna de esas cosas te va, no te preocupes, porque es una urbe preciosa donde la cultura ocupa también un lugar importante.
Con las otras distracciones son pocos los que saben que en Ámsterdam hay más de medio centenar de museos que visitar.
Entre los mejores museos que ver en Ámsterdam encontrarás el Rijksmuseum, que alberga le mayor colección del mundo de los prolíficos artistas holandeses; el Van Gogh, segundo museo más visitado del país y que expone más de 200 obras del genial pintor; la Casa de Ana Frank, donde la niña judía más famosa de Holanda escribió su diario; el Museo Rembrandt; y el Museo de la Ciencia NEMO, perfecto para una visita en familia.
5. El Barrio Judío de Ámsterdam
Y si el museo de la casa de Ana Frank te parece una visita interesante, debes descubrir el resto de esta parte histórica de la ciudad.
Recordando la terrible historia de Ana Frank, te metes en una máquina del tiempo que te lleva a la Ámsterdam ocupada en la Segunda Guerra Mundial. El tour del Barrio Judío de Ámsterdam suele comenzar en el Museo Histórico Judío, para recorrer después las calles del barrio de la estrella de David, con sus sinagogas y el monumento a Auschwitz.
6. La Experiencia Heineken
En el siglo XIX se creó, en Ámsterdam, la fábrica de la cerveza holandesa con más renombre en el mundo. No soy un experto cervecero, y según mis amigos – a varios de los cuales sí que considero doctorados en el tema -, la Heineken no es, precisamente, una de las mejores cervezas que han probado. Sin embargo, hay que reconocer que la cerveza verde es un auténtico gigante del marketing.
La fábrica de Heineken es el lugar perfecto para conocer evolución de la industria cervecera, tomarte una Heineken bien fría y llevarte algún souvenir de la visita.
7. Autobús turístico de Ámsterdam
Si tienes poco tiempo en tu viaje a Ámsterdam y quieres conocer lo máximo posible de la ciudad – aunque sea de un vistazo – la opción del autobús turístico puede ser la más óptima. También puede servirte para hacerte una idea de los mejores lugares que ver en Ámsterdam y decidir, después, cuáles visitar.
El recorrido del autobús turístico de Ámsterdam tiene 11 paradas y dura una hora, si no te bajas en ninguna de ellas. Además, te proporcionan una audioguía en español que te explicará los secretos de Vondelpark, la casa de Ana Frank o el Wester Market.
Además, podrás bajarte las veces que quieras y tomar otro bus en un período de 24 o 48 horas (según el billete que compres).
8. Tour gratis por Ámsterdam
Y si quieres conocer mejores lugares que ver en Ámsterdam sin que te cueste dinero, siempre puedes apuntarte a uno de los tours gratuitos de la ciudad.
Suelen ser conducidos por gente joven, preparada y amante de su ciudad que querrán que te marches de ella con la mejor impresión posible. Además, te explicarán todo en español. Eso sí, no te olvides de dejar una pequeña gratificación al guía. Yo también trabajo como guía en mi querido Myanmar, y es una profesión que exige paciencia, conocimientos, amor por lo que haces y, en ocasiones, mucha mano izquierda.
9. Excursiones desde Ámsterdam (Delft, Róterdam y La Haya)
Un parque de Róterdam
Hay muchas otras cosas que hacer en Ámsterdam, pero si ya has disfrutado de todas las que querías y aún te queda algo de tiempo libre, quizás es el momento de abrir el mapa y ver qué lugares atractivos se encuentran lo suficientemente cerca de la capital holandesa como para hacer una excursión de un día.
En mis distintas visitas a Holanda he conocido lugares como Róterdam – en la que pasé un fin de semana y me sorprendió muy positivamente -, La Haya – no me dijo mucho -, Delft, la estudiantil y bella Leiden, y la increíble Madurodam, ese mundo en miniatura que maravilla a grandes y pequeños.
¿Cuál de ellas te gustaría conocer?
10. Otras excursiones en Ámsterdam
Aunque haya visitado en cuatro ocasiones la capital holandesa, seguro que se me han quedado cosas en en el tintero. Por eso, te dejo aquí otras ideas de excursiones que a mí aún me quedan por hacer:
Aprovecha tu tiempo en Ámsterdam al máximo con alguna de las siguientes excursiones o actividades con guía en español y con muy buenas recomendaciones de sus usuarios:
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