A pocos kilómetros de Barcelona y con un escenario ideal en el interior del parque natural del Delta del Llobregat con los aviones del cercano aeropuerto de Barcelona sobrevolando nuestras cabezas y las playas al sur de la Ciudad Condal, tenemos una visita ideal para realizar con niños: el CRAM (el Centro de Recuperación de Animales Marinos) y sus actividades enfocadas a la divulgación y aprendizaje del rescate y cuidado de tortugas, delfines y tiburones del Mediterráneo.
Oficinas principales del Cram en el Prat del Llobregat
Acudimos un sábado con la entrada previa adquirida. Es imprescindible pasarse por la web oficial del CRAM para ver la agenda de actividades y apuntarse al menos con un día de antelación.
Nosotros optamos por la visita guiada para niños de 5 a 10 años enfocada en el rescate y cuidado de tortugas.
Durante la visita los participantes entran en el juego de representar una de las acciones a realizar en el proceso de rescatar y curar una tortuga
La actividad tiene una duración de hora y media y a través de ella aprendemos de manera sencilla y didáctica todo el proceso desde que alguien encuentra una tortuga herida en las costas hasta que se lleva al centro de recuperación, los veterinarios la curan y a ser posible la devuelven a su habitat natural en el mar.
Para ello, una persona del CRAM nos lo explica con una réplica de tortuga y cada uno de los pequeños visitantes toman parte en la actividad convirtiéndose en pequeños veterinarios por un día.
La mayoría de tortugas que llegan al centro han sido víctimas de tragar bolsas de plástico, han sido atrapadas por redes pesqueras o han sufrido el síndrome de decompresión, al igual que los submarinistas, porque alguien las ha subido demasiado rápido a la superficie.
La tortuga Casimiro, un clásico del CRAM
Muchas de ellas podrán volver al mar, otras como alguna de las tortugas que podemos ver en el centro no serán capaces de hacerlo debido a enfermedades incurables o porque han sido domesticadas demasiado tiempo y son incapaces ya de valerse por sí mismas.
Curando las heridas de una tortuga ficticia con la clásica betadine
La vista al CRAM sin duda, es una manera muy divertida y didáctica de concienciar a los más pequeños sobre la fragilidad del ecosistema, del impacto que tienen las bolsas de plástico y otros desechos que no dejamos en su sitio: en el contenedor. Todas actividades lúdicas giran en torno a la recuperación y conservación de la biodiversidad marina del Mediterráneo.
Asimismo, en el CRAM ofrecen visitas variadas según las edades e interés. Aparte del taller sobre cómo se rescata a una tortuga también existe la versión para rescatar y cuidar a delfines, talleres de formación y otras modalidades más a fondo destinadas a adolescentes y adultos interesados en la profección del fondo marino de nuestras costas. En la web oficial del Cram encontraréis todas las modalidades existentes.
Contemplando las tortugas que se encuentran en recuperación antes de ser devueltas al mar
Información práctica para visitar el CRAM del Llobregat
Horarios:
Generalmente las actividades familiares se realizan los sábados y domingos con dos turnos de hora y media. Uno a las 10 de la mañana y otro a las 12.
Consultad en la web las diferentes opciones disponibles por día.
Precio de la entrada:
Precio para la actividad de rescate a las tortugas:
Adultos: 10.5 euros
Niños de 5 a 12 años: 5,5 euros
Niños menores de 5 años: gratuito
Cómo aparcar:
Frente al CRAM encontraréis un espacioso parking público frente a la carretera principal con vistas al mar. Una vez aparcados, deberéis llamar al timbre de la puerta principal y caminar por andar por un camino de tierra los 200 metros que nos separan del centro.
Cómo llegar:
Ubicación:
Passeig de la Platja, 28-30, 08820 El Prat de Llobregat, Barcelona.
Sitio Oficial | CRAM
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