5 países perfectos para recorrerlos en coche

Hoy en día, explorar un destino – de una cierta extensión – en coche es la mejor manera para conocerlo a fondo.

Por muy bueno que sea el sistema de transporte público, siempre quedarán bonitos rincones a los que  no podrás acceder con él. Por otro lado, contratar un servicio privado de excursiones o chófer te costará un ojo de la cara.

Eso sí: normalmente, no podrás llevarte tu propio coche (salvo que viajes a un país muy cercano a tu lugar de residencia) y te tocará alquilar un coche en destino.

Aunque, como digo, es cierto que esta suele ser la mejor manera de descubrir un país a fondo, lo cierto es que hay algunos destinos que son aún más propensos a ello. Ya sea por su gran belleza natural, su escaso servicio de transporte público o por la existencia de unas carreteras tan espectaculares que invitan a detenerse en cada recodo.

En mi mundo conocido, me he encontrado con varios ejemplos así. Aquí os dejo mi lista subjetiva de los mejores países del mundo para recorrerlos en coche:

Irlanda

Horn Head, en Donegal

En primer lugar sitúo a mi segunda casa.

Viví en Irlanda algo más de 8 años y la recorrí prácticamente en su totalidad en distintas etapas.

Irlanda es un país complicado de explorar a fondo si tienes que confiar en su servicio de transporte público. Solo encontrarás servicios fiables y regulares de trenes y autobuses entre sus ciudades principales, pero la parte más bella de Irlanda es precisamente aquella en la que se encuentran los pequeños pueblos y la naturaleza en estado puro.

Aunque las carreteras irlandesas no son, precisamente, las mejores de Europa – de hecho, diría que se encuentran entre las más estrechas por las que he conducido -, sin embargo, sí que te llevan por unos lugares de impresionante belleza.

Los lugares más bellos de Irlanda los encontrarás pegados a la costa. En el oeste de Irlanda, la Península de Dingle, los famosos acantilados de Moher, los menos populares – pero incluso más bellos y más altos – de Slieve League. El Parque Nacional de Connemara y el Anillo de Kerry son otros sitios preciosos del oeste irlandés.

En el norte, Donegal representa a la Irlanda ancestral, donde aún se escucha el gaélico en las casas. Belfast y la Calzada del Gigante son los principales tesoros de una Irlanda del Norte que tienes muchos más lugares que ver de los que imaginas. Dublín y sus alrededores en el este y Cork y Wexford en el sur completan una vuelta a la isla que no te puede llevar menos de 3 semanas.

Nueva Zelanda

Si a Peter Jackson las dos islas de su Nueva Zelanda natal le parecieron el mejor lugar para que Froddo y sus ocho compañeros de la Comunidad del Anillo vivieran su intrépido y arduo camino hacia el el fuego del Monte del Destino en su afamada trilogía cinematográfica ‘El Señor de los Anillos’, a mí el lugar me parece idílico para recorrerlo en coche. O mejor, en autocaravana o similar.

He recorrido las dos islas de Nueva Zelanda en dos años y temporadas distintas. A principios del año 2004, lo hice durante un mes del verano austral, mientras que en 2011, estuve por allá en mayo, lo que viene a ser el final del otoño en esa parte tan lejana (Nueva Zelanda es el país más alejado de España en el planeta) del mundo.

Además de aconsejaros que elijáis su verano para visitar Nueva Zelanda (las horas de luz solar son muy escasas en otoño e invierno), os recomiendo encarecidamente que os gastéis un poco más de dinero y no toméis el famos Kiwi Bus con el que muchos mochileros recorren Nueva Zelanda.

Es el típico servicio en el que compras un billete único (o por zonas) y puedes subir y bajar cuantas veces quieras a lo largo del recorrido. Esto está bien para ver los sitios más emblemáticos de Nueva Zelanda, pero este es un país en el que la Madre Naturaleza echó el resto cuando lo creó. Cada esquina tiene algo que te va a querer hacer parar.

Ríos, lagos, montañas, volcanes, bosques, junglas, fiordos, glaciares, rutas senderistas que parecen no tener fin, campings ideales, miradores naturales, infinitos parques nacionales, acantilados… Nueva Zelanda es una oda a la naturaleza como pocas otras encontrarás en el mundo.

Sus carreteras no son las mejores del mundo, pero son más que suficientes para el poco tráfico que vas a encontrar. Podrás descubrir uno de los países más hermosos del planeta si ningún tipo de estrés al volante.

Australia

Sydney Opera House y Harbour Bridge, Sidney, Australia

Si quieres conocer a fondo la salvaje Australia sí que no te queda otra opción más que hacerlo por carretera y con tu propio vehículo. De nuevo, como ocurre con Nueva Zelanda, lo mejor es viajar en autocaravana o similar. En este caso, incluso con más razón, pues en la Australia profunda incluso te resultará complicado encontrar alojamiento para pasar la noche.

Y es que Australia es un lugar vasto e inhóspito como pocos vas a encontrar en el mundo, sobre todo en el llamado ‘Primer Mundo’.

Yo viajé por gran parte de la costa oeste australiana y pasaron horas sin que me cruzara con otro vehículo. Las carreteras de esa zona son, básicamente, una superposición de rectas que parece no tener fin. A ambos lados de la calzada, arena roja, el mar (más o menos cerca dependiendo del tramo), arbustos y una legión de animales capitaneada por canguros y emús.

No es una tontería la previsión de combustible en el oeste, centro y norte de Australia, pues hay tramos de 400 o 500 km en los que no encontrarás ni una estación de servicio en la que repostar.

Sin embargo, la costa este y el sureste de Australia ya es otra historia. Brisbane, Sídney o Melbourne son algunas de las principales ciudades que encontrarás en estos lugares. En esta parte del país, las poblaciones son mucho más abundantes y será más parecido a un roadtrip por Europa, exceptuando el paisaje.

De entre todos los recorridos por carretera que puedes realizar en Australia, el que no puedes perderte de ninguna de las maneras es el que te lleva por la Great Ocean Road. Su trazado, de unos 250 km, te lleva por la franja costera poblada más bella de Australia, con especial mención a los famosos Doce Apóstoles: formaciones calizas que han sido separadas de la costa por la erosión de viento y agua y ahora aparece solitarios en el mar.

Estados Unidos

Quinta Avenida en Navidad

La madre de todos los road trips – al menos desde el punto de vista cinematográfico – es Estados Unidos.

Un país tan enorme como Estados Unidos solo puede ser recorrido a fondo por carretera. Aunque su trazado más conocido a nivel mundial es la famosa Ruta 66 – 4.000 km de carreteras que unen Chicago y Los Ángeles, atravesando todo el país de costa a costa -, son múltiples las carreteras que merecen la pena en Estados Unidos.

No podía ser menos en un país que atesora una cantidad abrumadora de Parques Nacionales, territorios deshabitados, bosques, ríos, pequeños pueblos de la América profunda y lugares tan estrambóticos como Las Vegas.

Cualquier road trip en Estados Unidos tiene el sello de una aventura de calidad.

Croacia

 

Croacia es una perla que, debido a la guerra fratricida y a otros asuntos políticos, se mantuvo en el anonimato turístico durante demasiado tiempo. Sin embargo, en el siglo XXI despertó como un león rugiendo y reclama la posición que le corresponde como uno de los países más hermosos de la Vieja Europa.

Croacia posee ciudades como Zagreb y Split, y otras que son de cuento medieval, como la esplendorosa Dubrovnik o la menos conocida Rovinj.

La zona de Istria, al norte del país y cerca de la frontera con Eslovenia, es ideal para comenzar un road trip que te lleve al sur de la costa adriática. Bosques que dan cobijo a calas de aguas cristalinas, pueblos medievales, montañas con acantilados dramáticos que mueren en el mar, gente amable y una gastronomía variada son los puntos esenciales de un viajes por carretera que se encuentra entre los mejores del mundo.

 

Y tú, ¿qué países has recorrido por carretera y crees que merecen estar en esta lista? ‘Cuéntanos en los comentarios!

La entrada 5 países perfectos para recorrerlos en coche se publicó primero en Viajablog.

from Viajablog https://ift.tt/2nxL3Y8
via IFTTT